Setas y Algas Deshidratadas

Las setas y las algas son alimentos altamente nutritivos y versátiles que pueden enriquecer nuestra dieta, especialmente para quienes optan por una alimentación vegetariana o vegana. Gracias a su disponibilidad en formato deshidratado, es posible disfrutar de sus beneficios durante todo el año, independientemente de la temporada.

Setas comestibles y su uso en la cocina

El cambio climático ha reducido la duración de las estaciones como el otoño, afectando la disponibilidad de setas frescas. Sin embargo, las setas deshidratadas son una excelente alternativa. Algunas de las más destacadas incluyen:

Setas shiitake: Las más consumidas a nivel mundial, perfectas para salteados o platos de pasta.

Setas reishi: Conocidas por sus propiedades medicinales.

Setas locales: Como los moixernons, senderuelas o perrochicos, que aportan sabores únicos.

Para prepararlas, basta con hidratarlas en agua fría durante unos minutos. Una vez rehidratadas, se pueden incorporar fácilmente a ensaladas, salteados o guisos.

Algas comestibles y su preparación

Las algas, conocidas como las "verduras del mar", ofrecen una amplia variedad de opciones culinarias. Entre las más populares encontramos:

Alga nori: Muy utilizada en la cocina japonesa, especialmente para preparar sushi.

Alga wakame: Versátil y adecuada para ensaladas, sopas o guisos.

Alga kombu: Reconocida por su sabor umami, ideal para caldos y platos de larga cocción.

Al igual que las setas, las algas deshidratadas requieren hidratación previa en agua para recuperar su textura y volumen. Una vez listas, se pueden emplear en una gran variedad de recetas.

Tanto las setas como las algas deshidratadas son ingredientes prácticos y saludables que permiten disfrutar de sus propiedades nutricionales y culinarias durante todo el año. Incorporarlas a tu dieta es una forma sencilla de diversificar tus platos y aprovechar sus múltiples beneficios.